Cada vez más, la comunidad científica se pone de acuerdo en lo dañino e incluso peligroso que puede ser el azúcar. Debemos evitar dar a nuestros niños alimentos que se peguen a los dientes como chuches y caramelos blandos azucarados. Por su permanencia prolongada en la superficie de los dientes causan caries más fácil y rápidamente. Los dulces pegajosos se quedan en la boca más tiempo que las comidas que se mastican y se tragan rápidamente. Los ácidos que genera el niño al comer chuches son dañinos y continúan afectando a sus dientes durante más de 20 minutos, antes de ser neutralizados y dejar de causar daño. Eso quiere decir que, mientras más dulces coman durante el día, durante más tiempo están alimentando a las bacterias que causan la caries dental.
Es cierto que es difícil eliminar por completo el azúcar y las chuches, pero si vas a dar un dulce a tu hijo, es mejor hacerlo después de una comida. Después recuerdales que deben cepillar sus dientes, no lo olvides y sé firme con ello.
La comida y la merienda de los niños deben incluir alimentos variados y de los grupos alimenticios básicos, como frutas, vegetales y legumbres, incluyendo pan y cereal, leche y productos lácteos, frutos secos, pescado, huevos y carne.
Todos los que somos padres sabemos de la dificultad y de la pelea que supone una buena alimentación para los niños, pero no debemos bajar la guardia. Todo lo que hacemos lo hacemos por su bien y para que ellos aprendan a hacerlo por si mismos.
Si tienes algún truquito para conseguirlo con tus hijos, compártelo con nosotros!!
Como lo consigues tu!!!